Creo que no te resultará raro el reconocer ese estado en el que todos nos hemos encontrado en alguna ocasión, momento en la que estamos bajos de ánimo, en el que nos gustaría hacer miles de cosas pero nos faltan las ganas para ello.

Es muy típico ese domingo por la tarde en el que es inevitable pensar que llega el lunes y nuestra mente ya está pensando en todo lo que haremos esa semana. Sin embargo, pese a que nos gustaría llevar a cabo todas esas pequeñas cosas, para conseguir nuestros objetivos nos falta motivación. Nos falta el empuje necesario para que, cada día,  persigamos esos objetivos que “supuestamente” nos harían felices.

Sin embargo nos armamos de ganas y voluntad y hacemos hacemos una lista de propósitos cada domingo. Y cada lunes vuelta a empezar, ya que la voluntad nos llegó hasta el martes como mucho. Y ahí es donde comienza ese estado circular en el que damos vueltas sobre el comienzo de algo, pero nos resulta difícil avanzar hacia la meta.

Ayer, domingo por la tarde, me apetecía leer. Realmente no sabía muy bien de qué, con lo que me puse a indagar en internet. Por casualidad, de estas cosas fantásticas que ocurren por eso, si, por casualidad, me encontré con una lista de frases motivadoras de Albert Einstein, y pensé: Si a él, todo un genio, le funcionaron, ¿por qué no nos iban a funcionar al resto?

Así que  tras leerlas, y comprobar que coinciden con las premisas que sigue la psicología positiva, decidí compartirlas, a modo de consejos prácticos, para ayudaros a aprender a automotivaros, pero sobre todo, a mantener la motivación a lo largo del tiempo, que es lo que os permitirá conseguir vuestros objetivos.

ALBERT EINSTEINAlbert Einstein, entre muchísimas otras cosas decía:

“Todo hay que reducirlo a su máxima simplicidad, pero no más”. 

Como se suele decir, las cosas, en definitiva, la vida,  es más sencilla de lo que parece. No hay que tomarse las cosas demasiado en serio, hay que relativizar la importancia de todo. Si hay cuestiones que resolver, busquemos la forma, y si no se puede dejémoslo estar.

Decidí poner esta frase en primer lugar, porque quien me conozca (pacientes o relaciones personales) sabrá que mi máxima cada día es ocuparme de las cosas y no preocuparme por ellas.

La preocupación es el arma que utiliza el miedo para desmotivarnos y que abandonemos el objetivo que nos habíamos planteado. Cuando te descubras pensando “¿Y si…..?, estarás saboteando tu motivación.

Busca un equilibrio entre pensar y actuar. Piensa menos y actúa más.

 

“Nunca pienso en el futuro, llega bastante pronto”. 

Elige como momento de vida tu presente. Lo único que puedes controlar es lo que está ocurriendo ahora mismo. El presente te da la opción de que si no te gusta lo puedes cambiar, y si estás satisfecho con lo que tienes lo podrás disfrutar.

Olvidamos a menudo que tanto el pasado como el futuro son estados muy tramposos, ya que aunque aparentemente pensar en ello nos da sensación de control, no podemos cambiar nada.

No te desgastes pensando en lo que posiblemente llegue, llegará sólo. Ocúpate de tener el presente que te apetece, ya que te llevará al futuro que deseas.

GANDHI

 

Como decía Gandhi:

“Cuida tus pensamientos, porque se convertirán en tus palabras. Cuida tus palabras, porque se convertirán en tus actos. Cuida tus actos, porque se convertirán en tus hábitos. Cuida tus hábitos, porque se convertirán en tu destino”

¡Hagámos caso a estos dos sabios!

 

 

“Hay una fuerza motriz más poderosa que el vapor, la electricidad y la energía atómica: la voluntad”.

Para conseguir un objetivo lo más importante es el compromiso contigo mismo, la disciplina. Tenemos que ser exigentes en la implicación, pero tolerantes a la vez en la debilidad. Los extremos nunca son saludables. Si quieres mantener la fuerza de voluntad comprométete con objetivos realistas y mímate en la consecución de los mismos.

 

 

“La creatividad es contagiosa, pásalo”. 

Aumentarás tu motivación si compartes tus ideas y objetivos con tus seres queridos, compañeros de trabajo…El hablar de un tema provoca el efecto espontáneo de ir generando ideas y aumentar la creatividad.

Además provocarás que ellos te cuenten los suyos y el modo en que se plantean conseguirlos. Su método puede valerte.

¡Alimentemos la creatividad y dejemos que el miedo pase hambre!

 

“Sólo aquellos que intentan lo absurdo pueden lograr lo imposible”. 

No tengas miedo, no dejes que ni tu miedo ni el de los demás te desanimen.

El que no lo intenta no se equivoca nunca, eso está claro, ¿pero quieres eso?. Si tu respuesta es sí, habrás llegado a tu objetivo, pero si no lo tienes claro, no te conformes con la mediocridad de lo necesario, porque en ocasiones no es suficiente.

 

“Entre las dificultades se esconde la oportunidad”. 

Siguiendo a lo anterior, Einstein decía esta frase. Cuando alguien se propone un reto, un objetivo, no todo va a ser un camino fácil, nos encontraremos dificultades, que en ocasiones nos llevarán al descubrimiento de otros, al logro de cosas totalmente inesperadas. Si crees que has tenido un error, significa que estás avanzando a tu objetivo.

Piensa que los grandes descubrimientos de la historia fueron así.

 

 

“Somos arquitectos de nuestro propio destino”. 

Eres el único dueño de tus decisiones. Puedes llegar donde te propongas. No olvides que donde te encuentres, lo decidiste tú, decide ahora donde quieres estar. Es cierto que no todo depende d ti, pero sí lo importante. No hablamos de conseguir un objetivo tomando una decisión, todo lo contrario. Las grandes metas se consiguen haciendo muchas pequeñas cosas. Podemos volver a decidir cada vez que queramos. No pasa nada. Eso es la mayor ventaja de la vida.

 

 

“La única manera segura de evitar cometer errores es no tener nuevas ideas”.

Se constante. Levántate las veces que haga falta. Sólo fracasarás cuando dejes de intentarlo.

 

Como habrás observado, la sabiduría de Albert Einstein, residía en parte en ser plenamente consciente que la perfección no existe, que sólo podemos ocuparnos de nuestro presente, que de nada sirve preocuparnos de las cosas, que lo que nos ayudará será ocuparnos de ellas, que no tenía miedo al fracaso, pero eso sí, tenía muy claro que las cosas sin constancia, disciplina y compromiso no se conseguían. Tenía claro también que la vida no es eterna, que estamos de paso, y que por ello, la mayor motivación la encontraremos en disfrutar de nuestro presente y no esperar a conseguir las cosas para entonces ser felices. La felicidad reside en el camino a la felicidad. No perdía tiempo en buscar controlar lo que no podía

Además no tenía miedo a lo que pensarán los demás de él, ni del resultado de sus estudios, ni del fracaso, ya que para  él, el fracaso hubiera sido no intentarlo.

 

AHORA INTÉNTALO TU!!!!

Vanesa Hernández, psicóloga en Murcia.

Anuncio publicitario

Deja tu opinión, sugerencia o petición de información

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s