Decálogo para padres separados.Guía rápida.

Decálogo para padres separados.Guía rápida.

 

«Psicólogos en Murcia»

 

imagesCAOWMP8QEn mi anterior publicación, expliqué brevemente cómo se puede manejar una separación de pareja con los hijos pequeños.

Porque una separación de pareja es una situación bastante complicada, pero que, dependiendo de como la reconduzcamos con ellos, puede normalizarse bastante rápido, y sobre todo, no generarles sufrimiento, me he decidido a realizar una Guía Rápida de consejos que os ayudará a manejar la situación de forma sana emocionalmente hablando.

DECÁLOGO PARA PADRES SEPARADOS.

1. Haga posible que su hijo no deje de sentir un hogar. Que cada padre cree un espacio en su casa para que el niño pueda tener sus cosas y realizar sus actividades y juegos de forma cómoda. Que se sienta en su casa, no es un invitado.

2. Mantén contacto frecuente con tu hijo para que no se sienta olvidado. Tu te acuerdas de él, pero él no lo sabe.

3. Establece un rutina que le permita a los hijos hablar con sus los. Planea el modo para que el niño tenga claro que puede hablar con su padre o madre cuando quiera.

4. Llevar este plan a la práctica. Es decir, que el niño realmente hable, aunque sea por teléfono todos los días o cada vez que quiera con el otro, sin observar que eso puede ser un problema, o que no es momento para ello.

5. Recordarle a los niños continuamente que pueden contar con ambos. Nunca es suficiente las veces que se les recuerde.imagesCAXDIMXC

6. Preparar al niño con agrado para recibir al otro. Que esté vestido a tiempo y que el intercambio no suponga un momento de tensión.

7. Evidentemente, estar a la hora cuando se queda con el niño.

8. No cancelar los planes con el niño.

9. Mantener una comunicación abierta con el otro padre. Que todos podamos hablar con libertad con todos. Que podamos ser partícipes de lo que nuestro hijo hace con él o ella, con normalidad.

10. Se flexible a la hora de manejar horarios y actividades. Lo primero es el niño.

Además:

1. No controles la vida del otro padre, ni la de tu hijo con él. Lo importante es que el niño lo viva con normalidad.

2. No utilices al niño de canal de comunicación con el otro. Lo que le tengas que decir lo haces tu y sin el niño delante.

3. No hablar al niño de modo negativo acerca del otro. No ayudará ni para que tú te sientas mejor ni tampoco para que tu hijo lo haga.

4. Tu hijo no es un servicio de mensajería, así que, no le utilices para realizar pagos ni para dar ni devolver cosas.

5. No aproveche el momento en el que se ven por el niño para discutir o hablar asuntos de adultosthCAO27806

6.  No pongas al niño en la tesitura de elegir. No le hagas preguntas del tipo ¿con quién quieres vivir? ¿con quién estas mejor?

7. No interrogues al niño cuando venga de estar con el otro, ni tampoco le adviertas cuando se vaya a ir.

8. No utilices al niño para hacerle daño al otro. No se si conseguirás hacerle daño a tu ex-pareja, pero a tu hijo seguro.

9. No te estanques en el pasado y revivas continuamente las emociones negativas con tu hijo. No necesita verte enfadado/a todo el día, ni triste…

10. No olvides, que eres tú quien eligió un día a la otra persona y ahora has elegido separarte de ella. Tu hijo no ha elegido. Haz que sea lo más fácil para él.imagesCALKWEMG

Vanesa Hernández / Psicóloga en Murcia

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El niño celoso: Cómo ayudarle

El niño celoso: Cómo ayudarle

 

«Psicóloga en Murcia»

 

thCAKDS14LLos celos pueden definirse como un estado del niño  caracterizado por una sensación de frustración al creer que ya no son correspondidos emocionalmente por las personas queridas (padres, parejas…) o, al menos, con la intensidad y frecuencia que desean o necesitan

“Se trata de un rey destronado”. “Ya no es el rey de la casa”.

 

Los adultos, no podemos perder de vista que no es un proceso únicamente a nivel racional. Ellos pueden entender la situación, y en el caso de que no lo hagan se lo podemos explicar las veces que sean necesarias.

Pero lo que les está jugando una mala pasada son las emociones. Tienen sensaciones que no saben cómo manejar. De repente tienen miedo a no ser queridos y a ser abandonados. Se encuentran con situaciones nuevas en las que se espera que ellos reaccionen con normalidad, y ellos se sienten bloqueados, todo es nuevo para ellos.

Y cuando comprueban que no es nuevo, porque perdura, y que además se quedara el nuevo hermano se quedará  ahí para siempre, se rebelan esperando que su comportamiento cambie lo que no les gusta. Prueban a llamar la atención como su hermano, por ello comienzan a mostrar conductas regresivas: «Si él llora y se le atiende, yo llorare también».

Pero todo es un lío, porque a él no se le atiende de la misma manera.

Cuando los niños tienen celos, lo viven con mucho sufrimiento. De ahí la importancia de que los adultos tengamos la paciencia y comprensión suficiente para manejarlos.

En general, los niños celosos pueden manifestar algunas de las siguientes conductas:thCAPDK07N

  • Cambios de humor no justificados.
  • Signos de infelicidad.
  • Lloro frecuente sin motivo.
  • Tristeza acompañada de expresiones tales como “No me quereis…”
  • Conductas regresivas, (no presentes hasta la llegada de un hermano o ya superadas), con el simple motivo de llamar la atención de los padres (pipi en la cama, negarse a comer, agresividad injustificada hacia objetos o animales, comportamiento social anómalo, etc.).
  • . Vuelta a un lenguaje más infantil con presencia de gestos inmaduros como chuparse el dedo.
  • Alteraciones en los patrones de comida (menos apetito o más selectivo con los alimentos, rechazando platos antes preferidos o se le tiene que dar la comida) y sueño (insomnio, despertar nocturno, solicitar dormir con los padres, etc.)
  • Negativismo, terquedad, dificultad para obedecer.
  • Niegan sus  errores y culpabilizan a los otros de sus problemas o actitudes (en especial al hermano objeto de celos).

 

 

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Una vez identificados los celos, los padres y demás familiares relevantes deberán consensuar una estrategia común para ayudar al niño.

A nivel general exponemos una serie de orientaciones para minimizar las conductas celosas entre hermanos:

 

  • Es fundamental establecer un equilibrio en el trato a los diferentes hermanos de forma que no haya un trato de preferencia hacia ninguno de ellos ni se establezcan comparaciones.
  • Siempre es más eficaz alabar los aspectos positivos que recriminarle los negativos.
  • Delante conductas celosas (rabietas, desobediencia, negativismo, etc…) puede aplicarse la retirada de atención o alguna de las técnicas conductuales que se utilizan en la modificación de conducta. Si los celos suponen un reclamo de atención emocional, debemos ser capaces de dársela contingentemente a las conductas deseadas o positivas, nunca tras los episodios de celos.
  • Aumentar el tiempo en actividades y juegos de toda la familia es buen método para mejorar la comunicación y estrechar lazos.images[11]
  • Responder con tranquilidad a los episodios celosos, sin estridencias ni recriminaciones, comunicarle al niño nuestra decepción por su comportamiento y dejar de prestarle atención. Posteriormente cuando se tranquilice y, según la edad, podemos intentar razonar lo ocurrido y darle la atención emocional. No obstante, “razonar” con el niño celoso (aunque tenga edad suficiente para comprender nuestros argumentos) no funcionará siempre. Debemos entender sus conductas como síntoma de un malestar y no desde la perspectiva adulta.
  • Cuando los celos son del hermano mayor hacia otro de edad inferior puede resultar útil irle recordando de forma sutil las ventajas y “privilegios” que tiene al ser mayor (por ejemplo: acostarse más tarde o poder realizar ciertas actividades).
  • La relación entre hermanos tiene su propio ciclo de desarrollo. Si el clima familiar es emocionalmente estable y equilibrado, los celos puntuales, normalmente son superados y no presentan mayores problemas.